Preguntas frecuentes

Podemos responder de manera anticipada las preguntas más frecuentes que hemos aclarado a nuestros clientes con el paso del tiempo. Están ordenadas por categorías.

Sobre instalaciones eléctricas

Podemos decir que es lo mismo ya que se usa indistintamente. Pero si hablamos técnicamente, se distingue entre el Certificado de Instalaciones Eléctricas (CIE) y el Boletín de Reconocimiento de Instalaciones Eléctricas (BRIE) o Boletín Azul.

Puede contratar con cualquier comercializadora, salvo que quiera y pueda acogerse al bono social, en ese caso, debe contratar con una de las llamadas CUR, comercializadoras de último recurso.

Los CUR son comercializadoras autorizadas por el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio. Son las únicas que ofrecen el bono social eléctrico.

La documentación  dependerá de si ya existe el punto de suministro o no.

Si existe el punto de suministro la documentación necesaria será:

  • DNI
  • Título de propiedad o contrato de alquiler de la vivienda o local
  • Licencia municipal, si va a cambiar el uso
  • Boletín de la Delegación de Industria extendido por un Electricista Instalador Autorizado.Solo en el caso que usted desee contratar una potencia mayor a la máxima admitida que figura en el boletín del propietario anterior

Es recomendable aportar también:

  • Numero de su cuenta bancaria
  • Referencia catastral del inmueble

Si el punto de suministro no existe la documentación necesaria será:

  • DNI
  • Título de propiedad o contrato de alquiler de la vivienda o local
  • Licencia municipal, si va a cambiar el uso o se trata de primera ocupación
  • Boletín de la Delegación de Industria extendido por un Electricista Instalador Autorizado

Es recomendable aportar también:

  • Numero de su cuenta bancaria
  • Referencia catastral del inmueble

Cada 5 años. Los componentes de una instalación eléctrica pueden sufrir desgaste o daños por el uso cotidiano, por ello es importante solicitar el servicio de un electricista calificado para que revise la instalación de su vivienda y dé el mantenimiento preventivo o correctivo que ésta requiera.

Es importante que la revisión sea hecha por un electricista, quien además debe ser certificado, pues será él quien determine el estado de la instalación. Pero, como usuario de una instalación eléctrica usted puede tener algunos parámetros básicos para saber cómo se encuentra la instalación:

  • ¿Alguno de sus electrodomésticos da chispazos?
  • ¿’Baja la intensidad de la luz cuando se enciende el refrigerador?
  • ¿Los interruptores o fusibles saltan sin causa aparente?
  • ¿Su instalación tiene al menos cuatro circuitos?
  • ¿Los interruptores y enchufes se calientan, hacen falso contacto, están rotos o se ven dañados?

Si contestó que sí a las preguntas anteriores, es urgente que solicite los servicios de un electricista calificado que haga la mantención correctiva a la instalación.

Las instalaciones eléctricas son susceptibles al paso de los años y esto puede repercutir en una subida excesiva del consumo. Para comprobar si existe algún problema, lo mejor es apagar todo y ver si el contador digital de energía sigue contando, ya que esto significa que existe alguna fuga en la que se debe intervenir.

Según lo dispuesto en el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión, sí. Siempre y cuando la distribución eléctrica general y la empresa suministradora lo permitan y la nueva ubicación se encuentre protegida con un panel o un armario con ventilación interna para garantizar la protección y evitar condensaciones.

Seguro que en algunas ocasiones has oído hablar de la energía reactiva o lo has visto en la factura de la luz de tu empresa o negocio, ¿pero sabes realmente cómo se aplica? A diferencia de la energía activa que se transforma íntegramente en trabajo o en calor y se mide en KWh, la energía reactiva:

•    No se consume, ni sirve para calentar.
•    Se mide en kVArh (kilo voltio- amperio reactivo hora).
•    Se asocia a todos los aparatos, que para su funcionamiento precisen de una bobina (es decir, aquellos que funcionan con motores o transformadores) alimentados en corriente alterna (la intensidad cambia de sentido, circulación, esta va y viene de nuestro consumo a la red 50 veces por segundo).

Si la energía reactiva no se consume ¿por qué se penaliza cobrándose un recargo en la factura de la luz?

Porque hay que transportarla. Ya que, como indicamos con anterioridad, esta va y viene de nuestro consumo 50 veces por segundo, provocando variaciones en la intensidad eléctrica de los circuitos, desencadenando sobrecarga en las líneas transformadoras y generadora. Es decir, la energía reactiva no produce un trabajo útil, y es necesario neutralizarla o compensarla.
Esto les provoca a las compañías distribuidoras una mayor inversión en sus equipos de generación, transformadores, transporte, esto genera unos costes que finalmente nos trasladan en las factura como una penalización en concepto de energía reactiva.

La alta demanda de energía reactiva puede ser causada por varios factores, pero las causas primarias son equipos que crean campos magnéticos para funcionar como:

•    Alumbrado
•    Climatización
•    Ascensores
•    Frigoríficos
•    Motores

La energía usada para crear un campo magnético requerido para su funcionamiento nos esta produciendo esta energía reactiva y si no se instalan los equipos adecuados de compensación reactiva, como condensadores, filtros de armónicos su sistema eléctrico puede verse sujeto a una alta demanda de energía reactiva.

Los problemas derivados del consumo de energía reactiva son:

•    Sobrecalentamiento de transformadores.
•    Calentamiento de conductores.
•    Disparo de protecciones sin causa aparente.
•    Incremento en la factura eléctrica.
•    Paradas de producción debidas a los disparos intempestivos de los elementos de protección y manto.
•    Disminución de factor de potencia.

•    Se reducen las perdidas, lo cual se traduce en ahorro de energía, es decir de KWh.
•    Se aumenta la capacidad eléctrica de la instalación.
•    Se logra un importante ahorro en la factura eléctrica.
•    Mejora el voltaje de su instalación
•    Ahorro de costes
•    La compensación de la energía reactiva contribuye a la lucha contra el cambio climático.

La definición de potencia instalada viene recogida en el artículo 3 del Real Decreto 413/2014, de 6 de junio:

La potencia instalada se corresponderá con la potencia activa máxima que puede alcanzar una unidad de producción y vendrá determinada por la potencia menor de las especificadas en la placas de características de los grupos motor, turbina o alternador instalados en serie, o en su caso, cuando la instalación esté configurada por varios motores, turbinas o alternadores en paralelo será la menor de las sumas de las potencias de las placas de características de los motores, turbinas o alternadores que se encuentren en paralelo.

En el caso de instalaciones fotovoltaicas la potencia instalada será la suma de las potencias máximas unitarias de los módulos fotovoltaicos que configuran dicha instalación, medidas en condiciones estándar según la norma UNE correspondiente.

Según el apartado 5 de la disposición transitoria primera, para las instalaciones que tuvieran reconocida retribución primada el 14 de julio de 2013, la potencia instalada tomará como valor el de la potencia nominal que les correspondería por aplicación del artículo 3 del extinto Real Decreto 661/2207, de 25 de mayo, por el que se regula la actividad de producción de energía eléctrica en régimen especial.

Sobre aires acondicionados y bombas de calor

Para instalar un aire acondicionado bomba de calor es buena fecha antes de temporada alta. Antes de que empiece el verano o antes de que empiece el invierno para asegurarnos de tenerlo instalado antes de que empiece la demanda y poder disfrutarlo a tiempo.

Como recuerdan desde la OCU a través de su página web:- “Si el aparato de aire acondicionado que instalas en tu hogar no es suficientemente potente, resultará poco eficaz y, por el contrario, si su potencia es excesiva estarás despilfarrando dinero”. Por tanto, contra más preciso sea el cálculo para el aire acondicionado, más fácil nos resultará elegir el equipo deseado.

¿Potencia térmica o potencia eléctrica?

También es conveniente explicar la diferencia entre potencia térmica y potencia eléctrica asícomo explicar las unidades de medida que se suelen usar para referirse a la potencia del aparato.Lapotencia térmica se refiere a la capacidad de refrigeración (o  calefacción) del equipo, la potencia eléctrica mide el consumo eléctrico que se produce.  La potencia eléctrica es menor a la potencia térmica, ya que esta sería como la potencia máxima que puede alcanzar el equipo a la hora de refrigerar. La potencia eléctrica viene expresada en kW o kilowatios y la unidad de la potencia térmica es la kilocaloría o kc, también conocida como frigoría.

La frigoría es la unidad de medida para sistemas de refrigeración y aire acondicionado y sirve para expresar la potencia, normalmente, se suele hacer en frigorías/hora.

En muchos equipos aparece el BTU, una medida británica referente a   British Thermal Unit: unidad térmica británica, que equivale a 0,252 kcal, o sea que una frigoría (o kilocaloría) equivale a unas 4 BTU.

Watios, frigorías, BTUS,..calcular la potencia que necesita nuestro aire acondicionado se puede convertir en un verdadero via crucis, te recomendamos seguir leyendo para disipar tus dudas y conocer qué potencia necesita tu aire acondicionado para funcionar de forma eficiente.

Te ofrecemos varias formas de calcular la potencia que necesita tu equipo de aire acondicionado:

Cálculo de frigorías

Lo primero que hay que conocer es el espacio que se necesitará climatizar y de esta manera establecer una relación de por cada metro cuadrado necesitamos 100 frigorías, de esta manera un espacio de 40 metros cuadrados necesitará 40 frigorías por metro cuadrado, y así sucesivamente.  1 kw de refrigeración es igual a 0,86 kcal.

Tabla de potencias del aire acondicionado

Además, añade las siguientes consideraciones a tener en cuenta:

  • Si la habitación es muy soleada o es un ático, debemos incrementar los valores de la tabla en un 15%.
  • Si existen fuentes de calor, como por ejemplo en la cocina, incrementaremos la potencia en 1 kW.
  • Por otro lado, los materiales constructivos, la orientación de nuestra vivienda y el diseño de la misma influyen de manera muy importante en las necesidades de climatización.

Si quiere un cálculo más exhaustivo puedes usar la calculadora de la OCU:

https://www.ocu.org/vivienda-y-energia/aire-acondicionado/calculadora/calculadora-aire-acondicionado

Haciendo una buena instalación y llevándole un mantenimiento correcto la vida útil de un aire acondicionado bomba de calor puede se superior a los 15 años fácilmente.

Los equipos con bomba de calor dan frío en verano y calor en invierno. Prácticamente todos los equipos de aire acondicionado son con bomba de calor.

Los equipos de aire acondicionado constan de dos unidades, una interior y otra exterior. El principio básico consta en extraer el exceso de calor de la estancia a climatizar atraves de la unidad interior y llevarlo hasta la unidad exterior atraves del gas refrigerante que circula por el circuito frigorífico.

En los equipos de aire acondicionado con bomba de calor el sistema es el mismo, pero a través de una válvula de 4 vías se invierte el orden de las unidades.

Se recomienda limpiar los filtros del aire por lo menos antes de cada temporada. Unos filtros sucios causan una perdida de eficiencia y un aumento de consumo y pueden incluso bloquear el equipo de climatización. También es aconsejable revisar la salida del desagüe para evitar desbordamientos de agua.

Si solo queremos climatizar una estancia o dos es recomendable utilizar sistemas individuales, pero si lo que queremos es climatizar un piso entero podemos utilizar un sistema centralizado por conductos.

Depende de las características del lugar que queremos climatizar. Si el objetivo es enfriar unas cuatro o más habitaciones, vale la pena comprar un sistema centralizado. Estos sistemas necesitan la instalación de conductos para distribuir el aire.

En invierno se recomienda regular una temperatura de 21ºC y en verano 25ºC. Hay que tener en cuenta que si en invierno subimos mas o en verano bajamos mas el consumo de energía aumenta.

Si un equipo de aire acondicionado / bomba de calor esta bien instalado no hace falta recargarlo de gas. El gas refrigerante circula por un circuito cerrado y si tiene falta de gas es que tiene alguna fuga que hay que buscar y reparar antes de recargar.

El refrigerante es un fluido que tiene la facilidad de absorber calor a una baja presión y baja temperatura, y cederlo a alta presión y alta temperatura. Para ello, necesitamos que ese fluido tenga unas características especiales.Una de ellas (entre otras muchas), es que disponga de una temperatura de ebullición (cambio de líquido a gas) muy baja.

Este fluido se encierra en un circuito de tubería (cobre), y se pone en contacto con el ambiente que se quiere enfriar; el refrigerante empieza a absorber el calor y se evapora fácilmente (baja temperatura de ebullición), con lo cual, lo que esté en contacto con esa parte del circuito se enfriará. Por lo tanto, el refrigerante está absorbiendo calor a baja temperatura y baja presión, cambiando de estado de líquido a gas. Esta parte del circuito se denomina evaporador.

Es necesario ceder el calor absorbido por el refrigerante. Para ello, del evaporador sale el gas a baja presión. Se necesita que la presión y temperatura del gas sean altas para el cambio de estado a líquido, empleándose el compresor. Una vez que se consigue elevar la presión y temperatura, el refrigerante debe transformarse en líquido, es decir, condensar. Este cambio de estado, se realiza en el condensador, dónde se cede el calor absorbido al ambiente. Para poder reiniciar el ciclo, es necesario que el refrigerante en estado líquido a alta presión, la disminuya. Para ello, previo al evaporador, se intercala una válvula de expansión.

Para facilitar el proceso de evaporación y condensación, se utilizan corrientes de aire mediante ventiladores, que son los que realmente aceleran la evaporación aportando el caudal de aire necesario. De igual forma, se incluye un ventilador en el condensador para liberar el calor.

En definitiva, se puede concluir que por las tuberías en circuito cerrado discurre un refrigerante que absorbe calor en el evaporador (zona fría) y cede calor en el condensador (zona caliente).

Podemos proporcionar aire frío a una dependencia de un edificio, dependiendo de dónde se sitúe la unidad evaporadora. Una bomba de calor, puede revertir el ciclo refrigerante, con lo que en invierno se aporta calor (el equipo interior actuaría de unidad condensadora y el exterior de unidad evaporadora) y en verano aportará frío (el equipo interior actuará de unidad evaporadora y el exterior de unidad condensadora). El compresor siempre está en la parte exterior y esto se puede ver en los diferentes tipos de sistemas llamados de expansión directa unizona o multizona:

  • Equipo Compacto: los antiguos modelos que se instalaban en las ventanas.
  • Equipo Split: una unidad exterior y una interior (denominado partido).
  • Equipos MultiSplit: una o varias unidades exteriores y varias unidades interiores.

Podemos hablar de unidades tipo “casette”, unidades de conductos, unidades decorativas, etc… por lo tanto, existe una gran variedad de productos, para poder climatizar desde una vivienda, hasta un hospital.

Se recomienda visitar las web de los fabricantes, y revisar los catálogos; en ellos se descubren multitud de caractesticas técnicas y usos de los equipos.

Para aumentar la temperatura y presión del gas refrigerante, es necesaria la existencia de un compresor, siendo este el principal consumidor de energía eléctrica del sistema.

En los sistemas de aire acondicionado convencionales, el control de la temperatura ambiente se realiza con un termostato que actúa parando y arrancando los equipos, y consecuentemente el compresor, con lo que los picos de consumo eléctrico son muy elevados (sistemas todo-nada).

El sistema inverter, a diferencia de los aires acondicionados convencionales, actúa sobre el compresor variando su velocidad, adecuándose a las necesidades térmicas demandadas, por lo que, mediante un variador de frecuencia, se evitan los continuos arranques y paradas (sistemas proporcionales).

Las dos ventajas principales de un sistema inverter son:

  1. Confort
  • Se alcanza mucho más rápido la temperatura de consigna que en un sistema convencional.
  • Mantiene la temperatura deseada con menor gasto y mínimos excesos de frío o calor.
  • Menores niveles de ruido.
  1. Ahorro Energético
  • Evitamos las arrancadas constantes del compresor y optimizamos la producción de energía.
  • Menor mantenimiento debido a la reducción del desgaste mecánico del compresor.

Las iniciales VRV significan “Volumen de Refrigerante Variable”, aunque el término preciso sería “caudal de refrigerante variable”.

A diferencia de la bomba de calor convencional, este sistema tiene la capacidad de variar el caudal de refrigerante aportado a las baterías de evaporación-condensación, controlando más eficazmente las condiciones de temperatura de los locales a climatizar.

Todos los sistemas denominados inverter, son sistemas VRV, por lo tanto, cada unidad interior, trabajará de forma independiente de las demás, solicitando la cantidad de refrigerante que necesite; siendo una válvula de expansión electrónica la que dejará pasar la cantidad necesaria de fluido refrigerante.

De cada unidad exterior, “colgarán” un número determinado de unidades interiores, teniendo en cuenta las limitaciones del fabricante en cuanto a las potencias térmicas y distancias de tuberías, entre otras variables.

Los sistemas con recuperación de calor permiten aprovechar el calor de una estancia hacia otra dónde se precise calefacción.

Los sistemas VRV con recuperación de calor, nos permiten aportar calor y frío simultaneamente, “transportando” el refrigerante en estado gaseoso proveniente de las unidades evaporadoras hacia las unidades de calefacción, produciéndose allí la condensación del gas. Seguidamente el líquido condensado retornará a las unidades evaporadoras. Todo esto se realiza a través de un sofisticado sistema de control electrónico.

En resumen, un sistema VRV con recuperación de calor tiene las ventajas de un sistema VRV con el añadido de que el calor se puede transportar de una sala a otra sin desperdiciarlo.

El COP y el EER de una bomba de calor, nos van a indicar las eficacias de los equipos trabajando en calor o en frío respectivamente.

Las siglas COP, son las iniciales en inglés “Coeficient of Performance”, que puede traducirse por coeficiente de funcionamiento. Imaginemos que el COP de una bomba de calor sea de 3,5. Esto quiere decir, que cada kWh eléctrico se transforma en 3,5 kWh de calor. Una estufa eléctrica, por ejemplo, transforma 1 kWh eléctrico en 1 kWh de calor. Por lo tanto la eficacia de las bombas de calor es muy elevada.

Si el objetivo es proporcionar frío, hablamos del EER (Energy Efficiency Ratio), y siempre es menor al COP en calor.

Ahora, desde Enero del 2013, es obligatorio el etiquetado de los equipos de bomba de calor de hasta 12 kW al tiempo que se han introducido dos nuevos conceptos para definir la eficiencia de una bomba de calor.  Son los llamados coeficientes de eficiencia energética estacionales en calor y en frío SCOP y SEER. Sin complicarnos mucho la vida, estos valores aportados por el fabricante, nos indica la eficiencia de una bomba de calor durante la temporada, ya sea verano o invierno.

En la siguiente tabla, se indican los rangos de valores del SEER y SCOP en función de la clase energética del equipo:

Y la nueva etiqueta aporta información al consumidor de la calificación energética del equipo, tanto en frío como en calor (esta última en función de la zona climática), consumo anual de energía, carga de diseño, y niveles de potencia acústica de unidad interior y exterior: